« - »

Doctor Rodolfo Rosenfeld: Solidaridad sobre ruedas

Lunes, 7 de Septiembre de 2009

 

Doctor Rodolfo Rosenfeld
Doctor Rodolfo Rosenfeld

Socio fundador de la Clínica Las Condes y miembro del directorio de una de las fundaciones más importantes del país, nos cuenta de sus actividades de vida, los desafíos que aún mantiene y su amor por las motos.

Muchos de los pacientes que esperan en la consulta del doctor Rodolfo Rosenfeld no se imaginan qué actividades realiza este médico fuera de la Clínica Las Condes. Menos supondrían que este urólogo de profesión, está detrás de una de las instituciones de beneficencia más importante del país, la Teletón.

Este organismo, durante años ha podido salir adelante gracias al aporte de personas y empresas que han hecho de la Teletón un evento nacional. Sin embargo, su historia viene de mucho antes. Comienza con un grupo de individuos que sin ningún interés lucrativo pudo salir al paso de las dificultades que en esos tiempos causaba la poliomielitis y hacer de esta entidad lo que es hoy. Y Rodolfo Rosenfeld tiene mucho que ver en esto, ya que es hijo de uno de los fundadores de la Teletón, Ernesto Rosenfeld.

Desde sus orígenes, el doctor Rosenfeld siempre ha estado ligado a la ayuda social, una característica que se hizo vocación gracias a su padre. “El ambiente Teletón circuló en mi casa toda la vida. Trabajé en ella como urólogo durante 4 años fundando el departamento de Urología, luego pasé a formar el directorio. De esto han pasado 28 años”, expresó.

Con la incorporación de Mario Kreutzberger, comenzó el avance explosivo de esta fundación, dividiendo los aspectos médicos por un lado y los empresariales por el otro. Gracias a esto, hay un equipo que se encarga de conseguir los miles de millones de pesos para los 10 institutos a lo largo de todo Chile y hacerlos rendir por un período de 18 meses.

Mientras tanto, el doctor Rosenfeld se encarga de la Vicepresidencia Técnica de esta institución, gestionando los aspectos médicos más preponderantes. Todo ello ad honórem, demostrando su alta vocación de servicio. 

No obstante, para Rodolfo Rosenfeld, los avances que ha experimentado la Teletón van mucho más allá de una trascendente ayuda monetaria, es una terapia como país. “La fundación, ha cambiado la manera de pensar del chileno, creo que esa es la labor más importante que hemos hecho. La gente ha tomado conciencia que el discapacitado puede ser una persona que tiene otras capacidades”, dijo.

Rodolfo Rosenfeld en sus tantos paseos en moto
Rodolfo Rosenfeld en sus tantos paseos en moto

El socio fundador de la Clínica Las Condes, explica que además la institución ha generado un cambio en la urbanización del país. Aspecto importante debido a que hoy podemos encontrar veredas y escaleras con rampas para discapacitados, ascensores en algunas estacionen del Metro de Santiago o en la misma locomoción colectiva.

“Por otro lado la Teletón como elemento de solidaridad tiene un prestigio tan alto que, de alguna manera, pasa a ser nuestra. Es como la Parada Militar, son cosas que están arraigadas en la mentalidad del chileno”, señaló el doctor Rosenfeld.

El profesional reconoce en la Teletón un proceso de aprendizaje para el país en el tema de la discapacidad, y por lo mismo hoy está abocado a buscar la excelencia de esta institución, “Lo que más me atrae de trabajar en la fundación es poder luchar por estar en la punta de la ola en materia de rehabilitación, obteniendo la acreditación de calidad para los institutos a través de la CARF (Comisión en la Acreditación de Facilidades de Rehabilitación). Conseguir eso, es un desafío importante para mi”.

Fascinación por las ruedas

Uno de los aspectos más notables de este doctor, padre y abuelo, es su manera de ver y sentir la vida, no sólo trabajando para instituciones como la Teletón y la Clínica Las Condes, sino que además se da tiempo para una de sus pasiones, las motos.

Pocos pensarían que el doctor Rosenfeld, hombre de seriedad justa, sube a una moto y viaje largos kilómetros conociendo el mundo, paseos que para él son mucho más que un hobby, “lo tomo como un ejercicio espiritual. Hay algunos que leen, van a la ópera, otros realizan deportes y para mi desde hace 30 años es la moto. Subo a ella y todos los problemas que pueda tener se me olvidan”, reconoce.

El doctor Rosenfeld es un apasionado por las motos
El doctor Rosenfeld es un apasionado por las motos

Pero a la vez también es muy riguroso con los implementos que lo acompañan. “Mi ropa es de alta tecnología, tiene defensa en los hombros y en la espalda, implementos especiales para andar en moto. Por eso a veces me incomoda mucho ver a personas arriba de una, con hawaianas y pantalón corto, eso es un absurdo. Soy tan fanático de la seguridad, que si tengo que venir a la Clínica de traje y corbata, no puedo andar en moto, soy bien estricto en eso. No es cosa de ponerse botas y pantalón de cuero”.

Rodolfo Rosenfeld, se define como la antítesis del motoquero tipo Harley Davison. No es de los que usa tatuajes, cadenas ni pantalones a lo Coco Legrand. Por lo mismo, no cambia su BMW que la define como sobria y que no genera ruidos excesivos.

Es más, es tal su fascinación por las motos que no duda en integrar a su familia en esta actividad. “Somos un grupo de amigos que estamos hace mucho tiempo en esto. Hemos entusiasmado a nuestras señoras realizando paseos por la Patagonia, Punta del Este, el Lago Chungará, Europa, entre otros lugares. Somos motoqueros de carretera de alto nivel, profesionales del asunto”, señala Rosenfeld.

Si bien, reconoce que al principio su familia se preocupaba por los largos paseos en moto, hoy confían en su experiencia y sólo mantienen una palabra “cuidado”.

Luego nos muestra orgulloso una foto de su nieta con el casco del abuelo, “le encanta, no pueden creer que este viejo ande en moto”, comenta fascinado.


Dejar una respuesta